domingo, agosto 14, 2011

La vida sigue

Hoy hace dos meses que enterramos a mi padre.
Pasó al final lo que parecía que podía pasar desde hace tres años.
Han pasado dos meses y me sigo levantando por la mañana llorando como un niño sin saber porque. Supongo que es normal. Es una tristeza tan grande que se me empapan los ojos sin pensar en nada mas.
Han sido muy duros estos ultimos años. Muy duros e intensos.
Mi padre fue un gran hombre, y yo le queria mucho. Pero mucho, mucho.
Estuve enfadado con el durante tiempo por creer que su situacion habia derivado de su deseo personal de que "le hicieran todo".
Pense que habia acabado consiguiendo lo que decia que queria hace muchos años.
Pero esto no era asi. A veces pienso que si hubiera tenido una oportunidad de vivir "su vida" la que el queria, habria llegado muy lejos, pero cedio a la realidad y se adapto.
Se adapto con ternura y con amor, con mucho sentido del humor .
Eso, para mi , lo hace mas grande y maravilloso. Es ahi donde es dificil sobrevivir, en las cosas que te sobrevienen y no quieres.

Te quiero , papa, estes donde estes. Tu me has enseñado a ser el hombre que soy y luego he sido yo mismo.

Esta vida llega hasta donde llega y tu has luchado , aun queriendo terminar cuanto antes, como un jabato.

Estoy triste, pero tambien estoy esperanzado, porque veo a mi madre y a mi hermano curando sus heridas y con ganas de vivir.

Estaba muy preocupado por ellos y ahora estoy mas tranquilo.

Es lo que tiene la vida. Al cerrar heridas deja dolores metidos en la medula de tu ser, y abre a la vez a la cura de dolencias metidas dentro del corazon.

Espero tener la nobleza que siempe te he visto tener en la vida.

Nos vemos, papa, seguro que nos vemos, te quiero.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Así es Maxi. Uno se siente huérfano aunque tenga 50 años, sus propios hijos y su vida cotidiana. Bonito recuerdo de tu padre. Desde aquí un abrazo muy sentido. Puri.